"Defender el espacio", incidir y "encontrar soluciones" guiaron "Diálogos imposibles"

Texto y fotos: Ximena Loyda

Infografías: Mario Ortega

Con el objetivo de reflexionar sobre el derecho a la ciudad y la participación ciudadana, se llevó a cabo la cuarta edición de Diálogos Imposibles, un evento organizado por Labincide, una organización dedicada a la pedagogía política. La iniciativa busca fomentar la participación ciudadana y transformar la percepción de la política como una herramienta de cambio colectivo.

Julia Guguerli y Bosque Iglesias, representantes de Labincide, explicaron que el proyecto busca "involucrar más a las personas a que no se le tenga miedo a esa palabra tan fea que es política, sino que la hagamos propia".

Añadieron que la política debe entenderse como un camino para "incidir, cambiarnos nuestro entorno, organizarnos colectivamente y encontrar soluciones frente a los problemas que encontramos en el día a día".

Durante el primer conversatorio realizado en Querétaro, se abordaron temas como vivienda, transporte, infraestructura verde y participación ciudadana, con la presencia de Dakae Puga, Alma Luisa Rodríguez, Daniela Urbiola, Máximo Jaramillo, Abraham Cortés y Mariana Covarrubias.

Dakae Puga, representante de la Confederación Indígena del barrio de San Francisquito, relató cómo la comunidad resiste ante la gentrificación y el abandono institucional.

"Lo que hacemos para defender el espacio es habitarlo: ponemos música, damos talleres gratuitos, danzamos y hacemos ceremonias. Es una forma de resistencia y de conocernos entre nosotros", expresó.

En la intervención de Mariana, arquitecta y académica, compartió su experiencia en proyectos de vivienda colectiva y cooperativa. "Trabajamos con aprendizaje abierto; los estudiantes tenían sesiones abiertas con actores sociales y gobierno", comentó.

"Buscamos alternativas de vivienda que no dependan únicamente de desarrolladores inmobiliarios".

En el diálogo también se abordaron problemáticas como la movilidad y la accesibilidad.

Sobre la propuesta de un teleférico en Querétaro, una asistente cuestionó su viabilidad como solución al transporte público.