Presentaron libro que "celebra cultura indígena otomí" de Querétaro

Población de Amealco "se está desapegando de sus tradiciones. Comida (chatarra) ha tenido impacto en su salud y bienestar", advirtió Lydia Van De Fliert, autora de "El otomí en busca de la vida"

Texto: Ángel Yehuda Palacios

Fotografías: Emilio García

Infografías: Mario Ortega

El libro "El otomí en busca de la vida" "es una celebración de la cultura indígena otomí del estado (de Querétaro). Cada capítulo es un homenaje para el propio pueblo", resaltó Lydia Van De Fliert, antropóloga que estudió y vivió con otomíes de Amealco de Bonfil en 1988, que regresó a comunidades en 2025.

Lydia visitó el campus Amealco de la UAQ, el lunes 10 de noviembre.

Entrevistada al finalizar la presentación, advirtió que 30 años después, "el pueblo se ha llenado de negocios, de comida chatarra, grasosa, que ha tenido impacto muy fuerte en la salud de la gente".

"Hace 40 años, la gente de Santiago Mexquititlán fue nombrada como el pueblo con la mejor dentadura de todo el país. Ahora mucha gente sufre de diabetes y tiene mala dentadura porque la dieta ha cambiado (…)

"La gente se está despegando de las tradiciones. La comida ha tenido un impacto en su salud y bienestar. Es muy importante que los campesinos regresen a la milpa, y que se mantenga la cultura", consideró la especialista.

Libro recupera cuentos, leyendas y rituales de comunidades

Brenda Rodríguez, profesora de la UPN campus Querétaro, afirmó que el libro “es un excelente referente porque recupera textos, cuentos, leyendas y lengua que sirven de guía para futuros trabajos e investigaciones”, porque presenta la historia, cultura y tradiciones de la cultura otomí.

Mario Monroy y Antonio Flores destacaron la importancia del texto, ya que muestra tanto tradiciones y rituales de la cultura ñäñho hasta sus estructuras económicas, flora y fauna; pero también porque durante la investigación la autora vivió en comunidad y fue adoptada por liderazgos del pueblo.

“Este libro me permitió reencontrarme con mi cultura, mis ancestros y con todas esas historias que me contaban mis padres”, destacó Fernanda García, colaboradora del Centro de Estudios Interculturales.